Transcripción de la entrevista con Hank von Helvete:

Bueno, lo que se hace en el programa al comienzo del mismo es algo bastante físico. Se trata de conseguir sacar las drogas fuera del cuerpo, limpiar el cuerpo, recuperar tu salud, tú sabes, volver a estar en forma. Pero eso es sólo el comienzo del asunto.

Todo el programa está realmente diseñado para hacer que tú mismo te des cuenta de que se trata todo esto. No sólo la forma de evitar el consumo de drogas, sino darse cuenta de por qué tomó drogas y también darse cuenta de cuál es el impacto que se producía cuando tomaba la droga.

A veces puede ser difícil de afrontar al principio, pero cuando te das cuenta, de repente te has convertido en alguien que se preocupa mucho más por sus semejantes. Un ejemplo de ello, ya sabes, soy una estrella de rock y como que sentía que las drogas simplemente eran sólo una parte de mi estilo de vida y que no deberían ser ilegales y que cada persona debería poder elegir si consumirlas o no. Y yo estaba muy centrado en mi propia adicción a las drogas. Acabo de dejar las drogas porque quiero vivir un poco más, pero no hice daño a nadie, ya sabes. Yo estaba a lo mío.

De repente me di cuenta de que la clase de mensaje que yo estaba esparciendo era “está bien consumir drogas”.  Los muchachos que me admiraban me veían en este estado y yo como que les decía “hagan lo que yo digo, y no lo que yo hago”. Ya sabes, de cualquier forma, vámonos de fiesta. Y entonces me di cuenta de que en realidad estaba dando un ejemplo terrible para un montón de gente que en realidad estaban teniendo dificultades en su vida y yo estaba siendo uno de los tipos que decían que está bien estar en la oscuridad. Que está bien morir. Que esto es de lo que trata el rock and roll.

Entonces me di cuenta de que es mi responsabilidad lo que la gente hace inspirada en mí. Tengo que ser cuidadoso con las cosas que inspiro que haga la gente. Y entonces me di cuenta de que no sólo tenía un impacto en los jóvenes del rock que me seguían hacia dentro de la oscuridad. De repente me di cuenta de que cuando ellos van y compran un gramo de cocaína, esto tiene un impacto sobre una pobre gente en Bolivia. O, tú sabes, campesinos y niños pobres que no pueden cultivar alimentos adecuados… ya sabes. Se les trata como esclavos en las plantaciones de cocaína. Y tú estás apoyando esto cuando compras ese gramo. De repente me di cuenta de eso. Esa es la razón por la que hay unos 30.000 o 40.000 niños asesinados en México. Es algo así como que yo les permití empezar a matarse entre ellos por ser un cliente que quería ese gramo de coca y por inspirar a otros a hacerlo, ya sabes.

Y de repente ya no era sólo un asunto acerca de mí mismo y de mi búsqueda de placer o del escape del dolor o lo que sea. Era yo no siendo ninguna solución, sólo una parte de un problema enorme, enorme a nivel planetario. Y nadie aquí me dijo esto. Nadie ha dicho que es tu responsabilidad. Mira los bolivianos. Simplemente me di cuenta de esto de repente cuando lo miré en profundidad. Miré el libro El Camino a la Felicidad, ya sabes, y las diferentes etapas de lo que llamamos la parte ética del programa, y de repente me di cuenta de que la responsabilidad era algo que yo tenía, ya sabes. Yo podía asumirla, y siempre la tuve, pero como que se la daba a otra persona, como oh, eso no es mi problema. Es sólo yo y mi droga, ya sabes. Y de repente me di cuenta de que si me pongo a ayudarme a mí mismo y empiezo a inspirar a otros a dejar de consumir drogas y a hacer su programa, o inspirar a los niños a no empezar a tomar drogas, puedo ser una gota en el océano en el acto, pero para mí es un pequeño paso en la forma de hacer que sea innecesario el que se asesinen entre sí. Hacer que sea innecesario esclavizar a los niños porque eso sólo crea un producto que nadie quiere. Y esa es la visión que tuve. Si simplemente dejamos de comprar su producto, entonces no tendrán que matar y que tener esclavos nunca más, ya sabes.

De repente puedo asumir responsabilidad por toda la escena de drogas y decir que no está bien y que no es sólo tú y yo y el derecho a colocarnos, ya sabes. Se trata de todo el mundo. El derecho del planeta para tener personas que no consumen drogas, responsables y positivas, que no aceptan una moral baja o el asesinato y el robo y el engaño, ya sabes. Así que como que me di cuenta de que he estado traicionando a la humanidad y que tenía que arreglar eso. Y me da mucho placer y es reconfortante saber que tengo las herramientas para reparar el daño que he creado antes porque estoy aprendiendo la tecnología aquí / los diferentes pasos aquí. Y puedo usarlo para ayudar a otros también. Y si la gente me pregunta, “¿Estás haciendo tu parte para mejorar el mundo?”, Puedo decir: “Sí”. Bueno, hace unos años, si me hubieran hecho la misma pregunta, hubiera dicho: “al carajo el mundo”, ya sabes. Así que yo estoy haciendo mi parte ahora. Si tienes problemas para dormir por la noche, haz tu parte y duerme muy bien.

Para información acerca de los programas Narconon llame al 323-962-2404 | 800-210-3060.